Detalles

Los clientes querían una casa económica, de rápida construcción y a prueba de terremotos, por lo que los arquitectos recurrieron a un diseño basado en la estructura modular del contenedor marítimo. Para ello se utilizaron 3 contenedores de 20 pies donde se colocó la cocina, comedor, sala de estar y áreas de servicio, mientras que los baños y dormitorios se distribuyeron en 2 contenedores de 40 pies.

El piso fue revestido con madera dura de calidad (115 m2); el techo y las paredes fueron aisladas con celulosa aplicada por pulverización para evitar puentes acústicos y térmicos. Para controlar el calor del verano se colocaron paneles térmicos y ventilaciones cruzadas. 

La obra se colocó estratégicamente en el extremo oriental de un terreno de 6775 m2 con el objeto de cuidar la distancia del camino manteniendo una vista acertada de la Cordillera de los Andes. En procura de cuidar el piso y ganar altura para una mejor vista la casa fue asentada 55 cms sobre el nivel del suelo, dejando un espacio inferior para las instalaciones sanitarias.

Volumétricamente los 5 módulos fueron dispuestos en forma de ángulo recto creando 2 áreas definidas por estructura anexa, una social y pública (sala, cocina, comedor) y otra privada (dormitorios y baños). Un hall de acceso y un patio de servicio dan espacio y continuidad volumétrica a la casa.

La fachada se dispuso hacia el sector de los dormitorios y el pasillo, además para disfrutar mejor de las vistas del lugar se construyó una terraza sobre la sala y el comedor (a la cual se accede por una escalera caracol ubicada en un lateral), en los extremos del primer nivel se reutilizaron las puertas preexistentes para los balcones.

Este proyecto se denominó “Casa Liray” y fue llevado a cabo en 5 contenedores marítimos con una duración de 3 meses de construcción en Colina, Chile con un costo de 75.000 U$D en el año 2010.